Ayer -día festivo en algunos concellos de la zona- fueron muchos los que se echaron a las calles con el disfraz y animados por un sol que parecía anunciar ya la primavera. Los festejos fueron numerosos y variados. Los hubo dulces, como en Porto do Son, donde se elaboraron los postres típicos de estas fechas en la plaza de España. Filloas, orejas, melindres… no faltaba de nada. La dieta que muchos empezaron después de los excesos de Navidad sufrió un pequeño paréntesis.
También hubo lugar para la crítica y la ironía. Los políticos y la situación actual del país inspiraron muchos de los disfraces que lucieron los vecinos de la comarca.
Espectacular, como de costumbre, fue el desfile de A Pobra, en el que se pasearon personajes de película como Eduardo Manostijeras. También un enorme árbol andante acaparó todas las miradas, además de las carrozas y comparsas que parecían haber llegado de las Islas Canarias para la ocasión. No menos impresionante fue el recorrido en Boiro donde los disfraces se metieron al público en el bolsillo. Y es que, como de costumbre, no fue festivo, pero muchas empresas solo operaron por la mañana, lo que propició que muchos dejaron la rutina a un lado y se contagiaron del espíritu carnavalero.
En Muros y Rianxo tampoco quisieron perderse la fiesta. Los que más disfrutaron fueron los pequeños y en la villa de Castelao se instalaron hinchables y se ofrecieron talleres. Los niños todavía siguen de vacaciones y los muradanos aprovecharon al máximo una fiesta a su medida.
Os Barbanzanos Disfrutaron Dun Entroido Soleado E Moi Primaveral
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