1-1. El derbi de la ría entre el Boiro y el Arousa fue soso por la falta de juego y ocasiones de gol. Tan solo hubo llegadas que morían al borde del área o, incluso, unos metros antes. Los locales crearon peligro en jugadas a balón parado que se intercambiaban Padín y Pillado, pero su centros no encontraron un rematador claro. La ocasión más peligrosa de los visitantes en el primer acto fue un disparo de Camiño que recortó en el área y tiró fuera. Mientras, la más obvia de los locales fue una falta que lanzó Padín, que nadie remató y la defensa del Arousa no supo despejar en un primer momento. El resto de la primera parte transcurrió igual, con poco fútbol, mucho barullo y juego sin criterio por parte de ambos conjuntos.
1-1 tamén o noia contra o dubra. El Noia realizó ayer uno de esos partidos en los que se generan numerosas ocasiones de gol que, por uno u otro motivo, no acaban subiendo al marcador. Además, el mal estado del terreno de juego, que acabó embarrado y hacía casi imposible combinar más de cuatro pases seguidos, tampoco ayudó a los locales a desplegar su juego, que se basa en la combinación. Iván y David fueron los directores de orquesta que tutelaron al Noia en ataque desde el inicio del choque y generaron muchas de las ocasiones de los suyos, que, a excepción del único gol local, no entraron en la portería.
El Ribeira regresó ayer de Escairón con un punto después de empatar con el conjunto local tamén 1 a nun partido con mucho centro del campo y pocos pases verticales que generasen peligro en alguna de las dos porterías. El primer acto fue aburrido y no hubo dominador claro. El frío tampoco ayudó a los dos equipos, que no hicieron gran cosa hasta alcanzar el descanso. Ya en la segunda parte hubo que lamentar un gol en propia puerta del defensa celeste Madiop, que intentó despejar un balón que acabó colándose en la portería visitante. Diez minutos después, en el 70, Alberto logró el empate con el que se llegó al final del coche.